ESTADOS DE LA MATERIA
Sabías que toda la materia existente puede encontrarse en diferentes estados. Los cuatro estados de la materia en los que normalmente se encuentra dividida son: el estado sólido, el estado líquido, el estado gaseoso y plasma.
Cada uno de estos estados posee características propias, en donde encontramos similitudes o diferencias entre ellos.
El estado gaseoso
A mediados del siglo XX se desarrolló la teoría cinética de los gases, también denominada modelo cinético-molecular de los gases, con el fin de explicar su comportamiento y sus propiedades.
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Los gases no tienen forma ni volumen propio, sus partículas se mueven continuamente y ocupan todo el volumen del recipiente que las contiene. Las moléculas de un gas pueden trasladarse en el espacio: pueden fluir.
Debido a que sus partículas están muy separadas entre sí, los gases pueden comprimirse (reducir su volumen) con facilidad cuando se ejerce cierta presión sobre ellos; por eso se dice que son compresibles.
Además, al calentarse, los gases se dilatan, es decir, se expanden y ocupan más lugar, pero su masa no varía.
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El estado líquido
Supongan que toman una jarra, una probeta graduada y un balón aforado de 1 litro de capacidad, y los llenan con agua hasta la marca que indica este volumen. Los tres recipientes tienen diferente forma, pero contendrán el mismo volumen de líquido.
Los líquidos tienen volumen propio, pero no forma propia, por lo que adoptan la forma del recipiente que los contiene: a esta propiedad se la llama fluidez.
A la velocidad con la que se desparrama o fluye un líquido se la denomina viscosidad, y consiste en la resistencia que ofrecen los líquidos al escurrir. Por ejemplo, el aceite es más viscoso que el agua
El estado sólido
Las partículas de los sólidos se atraen con mucha fuerza entre sí y están fuertemente unidas. No fluyen. Los sólidos ejercen presión sólo sobre los cuerpos que están apoyados en él. Las temperaturas bajas favorecen que las sustancias estén en estado sólido.
En función del mayor o menor orden con el que se agrupan las partículas de un material, es decir, según la estructura espacial que adopten, los sólidos pueden clasificarse en sólidos cristalinos o sólidos amorfos
• En los sólidos cristalinos las partículas se disponen en formas geométricas ordenadas tridimensionalmente, denominadas redes cristalinas.
• Los sólidos amorfos presentan muy poco orden en la distribución de sus partículas, que se distribuyen al azar, sin formar redes cristalinas. Son ejemplos de sólidos amorfos los vidrios, las ceras y los plásticos.
Ahora, es impórtate recalcar que otra característica de los solidos es que se dilatan, es decir, aumentan su volumen al ser calentados.
Los ingenieros deben tener en cuenta esta propiedad de los sólidos, ya que cualquier material en este estado cambia su volumen al variar la temperatura ambiente.
El plasma, cuarto estado de la materia
Si a un gas se le entrega energía suficiente (calor o electricidad), sus partículas pueden perder algunas cargas negativas, y queda un conjunto de cargas positivas (cationes). Este estado, formado por gases ionizados, se denomina plasma.
Los cambios de estado de la materia
Con frecuencia observamos los cambios de estado de la materia; por ejemplo, al sacar hielo del congelador, que no es otra cosa que agua sólida, se convierte en agua líquida, o cuando se calienta agua líquida se transforma en vapor (gas).
De acuerdo con la teoría cinética, el aumento de la movilidad de las partículas de un sólido incrementa la temperatura. Si continúa aumentando la temperatura, las partículas adquieren energía suficiente para liberarse de sus posiciones fijas, y el sólido se convierte en líquido.
Si sigue subiendo la temperatura, el material pasa al estado gaseoso y sus partículas se mueven por todo el volumen del recipiente que lo contiene.
Los cambios de estado de los materiales son transformaciones físicas, ya que no se modifica su composición: tanto en forma de hielo como líquida o gaseosa, el agua sigue siendo la misma sustancia, de fórmula química H2O.