EL FIN DE LA UNIDAD ROMANA
Finalizadas las conquistas, el Ejército trataba de mantener y defender los limes o fronteras del Imperio.
Pero esta tarea fue cada vez más difícil, porque los pueblos germánicos, a los que los romanos denominaban bárbaros, atacaron repetidamente la frontera del Imperio en el norte de Europa.
Además, las fronteras en el extremo oriental del Imperio, en Asia, tampoco estaban tranquilas y sufrieron los ataques de los persas.
El aumento de poder del Ejército Las constantes guerras obligó al Imperio a mantener un ejército que incrementaba su poder y, en consecuencia, la figura del emperador se debilitó.
De hecho, los generales que contaban con el soporte de su tropa tenían la fuerza para deponer y nombrar emperadores.
Por ejemplo, en el siglo III, en el período
que conocemos como la anarquía militar, se sucedieron treinta y nueve
emperadores en tan solo cincuenta años.

Además, se irá acentuando cada vez más la diferencia entre la Parte Occidental y la Oriental del Imperio, ya dividido desde el año 395, a la muerte del emperador Teodosio el Grande (379-395).
El Occidente, eminentemente latino, empobrecido, ruralizado, contrasta con el Oriente, esencialmente helénico, rico, con una economía monetaria sólida, de carácter urbano y mejor defendido.
A la larga, será precisamente el Imperio Romano de Oriente el que logrará sobreponerse a las adversidades, prolongando la historia de Roma por todo un milenio: es lo que conocemos como Imperio Bizantino o Imperio Griego Medieval, que sólo caerá en manos de los turcos en 1453.
Occidente, agobiado por los problemas, morirá en 476 de enfermedad interna -algunos de cuyos síntomas hemos explicado brevemente-; las invasiones bárbaras jugaron un rol importante en el proceso, es cierto, pero no lo explican por completo.
En rigor, lo que sucedió ese año
fue que el Imperio Romano perdió sus provincias occidentales
DESCARGAR PDF GRATIS
Excelente 👌 profe gracias por compartir este material
ResponderBorrar